Sala de Payogasta

Amanecer contemplando el Nevado de Cachi

Sala de Payogasta es una antigua casona, con sus típicas galerías de recova y muros de adobe.

Tiempo atrás, en un viaje al vecino Cachi, habíamos hecho una reserva de último momento en la habitación disponible sin vista. Al conocer el hotelito sobre la Ruta 40 y sus suites con ventanales al Nevado de Cachi, supimos que debíamos volver.

Así fue que en un viaje en el que nos dispusimos conocer Luracatao decidimos pasar la noche en una de esas habitaciones, pues nos hacía ilusión amanecer mirando el colosal pico.

Era invierno y el frío implacable, por lo que no dudamos en prender un fuego en el hogar de la habitación, mientras disfrutábamos de Hombre Jaguar, el corpulento tannat de la finca.

En la suite, destacaba un tapiz de Héctor Cruz, el artista salteño asentado en Amaicha del Valle conocido por sus obras en telar. En otros cuartos hay piezas del legendario Pajita García Bes.

En la mañana, el despertar fue como lo habíamos imaginado, el cielo se fue aclarando, dando paso a un espectáculo de colores.

Luego disfrutamos el desayuno en la galería cerrada, con grandes ventanales, contemplando hipnóticos el Nevado.

La ubicación estratégica de la Sala, justo en la ruta 40, junto con la excelsa calidad de los vinos de la pequeña bodega vecina, la convierte en una opción relevante para quien emprenda la vuelta a los Valles.