Flor del Pago
Cocina Italo Colonial
En Lozano, a sólo veinte de la ciudad de San Salvador, y justo antes de ingresar en la Quebrada de Humahuaca, un restaurant de cocina de autor sorprendió a @tripticity_ en una de sus usuales visitas a la inagotable provincia de Jujuy.
Habíamos decidido conocer Caspalá, el pueblo auténtico rankeado entre los más bonitos del mundo por la Organización Mundial de Turismo. De regreso a la ciudad de Salta, después de tantas horas de manejo por caminos desolados, en los que la inmensidad de las serraníanas parece no acabarse nunca, un stop gourmet se sintió como un premio a la valentía de salir del confort y animarse a la aventura. Mas no pensábamos que el paladar iba a estar tan de fiesta con los platos elaborados magistralmente por Daniel Hansen, quien supo consagrarse en Buenos Aires con su restaurante Pecora Nera.
Es una casa de campo, con un amplio jardín escoltado por tejas de otro tiempo. Allí, como un hijo pródigo, el chef abrió Flor Del Pago en el invierno de 2022. Su propuesta de cocina “italo-colonial”, ejecutada al estilo restaurant de gran ciudad, supera la exquisitez y la excelencia.
La carta de tradición italiana sigue la secuencia del antipasti, primo y secondo piatto.
Ese mediodía de octubre, el sol calentaba el aire fresco, resabio del invierno, por lo que decidimos tomar la mesa de la galería.
De cortesía, recibimos unos pocillos de café, con lo que iniciamos el festín gourmet con una deliciosa sopa de maní, ingeniosamente servida. Al degustar, supimos de inmediato que ese almuerzo sería memorable.
La entrada fue un pulpo sobre humita, una combinación de los principales platos de dos cocinas diferentes, como la mediterránea del pulpo al estilo español y la humita típica local.
Los principales que siguieron fueron toda una fiesta de sabor. Un suave risotto de habas y una superlativa pasta: ravioles de pavita marinada en coñac con crema de champaña y hongos frescos. Tanto la pasta como el arroz fueron servidos en su punto justo, lo que da cuenta de la rigurosa manufactura del chef quien se presentó en la mesa para saludar a los comensales, cumpliendo el rito de los grandes maestros de cocina. Por cierto Hansen es miembro de la mítica Academie Culinaire de France y fue reconocido por la Academia Italiana della Cucina.
Para terminar elegimos una strudel di mele con una crema helada de canela que acompañamos con una infusión también ideada por Daniel, bautizada con el nombre de lapacho amarillo, un mix de te blanco, manzanilla, menta, cedrón y melisa. Otro gran logro de la casa. Solo algunos restaurantes cuentan con una carta de infusiones para terminar el banquete. Fue el detalle perfecto, la gran culminación.
Partimos con el anhelo de regresar pronto para disfrutar de la cocina extraordinaria de Flor del Pago y con la alegría de saber que se encuentra proyectado un hotel para esta meca gourmet del norte argentino que es Jujuy.