Artesanías en lo de Primitivo
Una tienda auténtica en Tastil
Justo frente al Museo de Sitio de Santa Rosa de Tastil una tienda de auténticas artesanías enamora al visitante.
Al ingresar, Primitivo Yapura da la bienvenida y con cortesía responde cada consulta, relatando la procedencia de los objetos a la venta y -también- un poco de su historia personal. Fue marino en Buenos Aires, prestando servicios en el puerto de servicio de biología naval, luego albañil y finalmente artesano.
Bufandas, sweaters, gorros, mantas y medias de lana de oveja o llama colman las tablas de exhibición. Todo lo teje su esposa Mercedes.
También lindísimos pantuflines y sombreros de fieltro, un tipo de textil no tejido que se hace aglutinando entre sí varias capas de lana o pelo de animales, con mucha presión y calor. De esta operación resulta el aglomerado típico del noroeste argentino.
Otro sector está dedicado a sus propias creaciones hechas en madera de cardón, como paneras, servilleteros, veladores, marcos de cuadros o bandejas.
En las gruesas paredes de adobe cuelgan tapices de artesanos locales replicando el diseño de la bella bailarina de Tastil.
Una estantería en la esquinita contiene hierbas y yuyos medicinales: la pupusa (para el mal de altura), la muña muña (para “empujar” el amor), airampo (moraditas flores secas de cactus), rica rica (para el mate), verbena o cedrón. Notorios son los pétalos de rosa secados al sol; el árido clima de la Puna logra mantener su atractivo color rosa.
No faltan las distintivas miniaturas de llamas hechas en lana o los cactus tejidos, tan simpáticos como animados.
En el fondo, una radio de otro tiempo musicaliza la pintoresca escena en lo de Primitivo, de esas que @tripticity_ siempre aprecia y disfruta, tanto como la ineludible compra en su tienda.